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Charco Azul |
Partir hacia un lugar siguiendo referencias de colores, una señal verde, una casa roja, puede que no sea muy recomendable, pero igual te puede llegar a lugares que la verdad no puedes creer que existan en el estado de Durango, como es Charco Azul, en los límites de los municipios de Canatlán y Nuevo Ideal.
Bueno imaginado lo que significa un “charco”, pensamos que llegaríamos a un pequeño ojo de agua y grata sorpresa fue contemplar la pequeña represa que hay en este lugar, a la que se le llama “Charco Azul” y que retiene sus aguas provenientes del recorrido del agua entre los cañones de este paraje.
Lo bueno para la caminata era, un día propicio para hacer senderismo, nublado agradable temperatura ambiente, con posibilidades de lluvias, lo malo para la fotografía de paisaje no era nada benéfico para llevar esta práctica.
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Paisaje |
Estábamos sentados en las grandes rocas a la mitad del pequeño rio, mirando una pequeña cascada que caía en una tinaja y el agua buscaba su salida entre las rocas formando una especie de rápidos hasta que la corriente se ocultaba debajo de una inmensa roca que abarcaba en su totalidad el lecho del rio.
Buscando la salida de la corriente de agua, rodeamos la gran roca y nos encontramos con una resbaladilla natural de piedra, donde el agua caía a retomar el curso del rio en medio de una naturaleza muy típica del bosque duranguense, de llamar la atención, era las grandes piedras que había sobre el lecho del rio, así como, los troncos atravesados en el rio, donde pudimos constar que en tiempo de lluvias este placido rio, se convierte en un violento y ruidoso rio.
Por el sendero que íbamos abarcando a cada paso, pudimos ver las flores de la sierra, hongos y las huellas de hasta donde el nivel de agua, puede subir; no pudimos observar mucha fauna, sería el día nublado, la amenaza de lluvia, solamente las vacas, rumiando la hierba y fijando su mirada hacia nosotros al vernos pasar.
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Salida del Cañón |
Continuando nuestro camino, llegamos a la salida de nuestro pequeño cañón, pero para encontrarnos con la salida de otro cañón y ahí se acoplaban los ríos, para empezar un solo cauce de agua, exploramos un poco la salida del cañón de nuestra derecha, en busca de una cueva, pero no encontramos nada, así que decidimos volver hacia el cauce del rio y seguir el camino con la señal del peñasco que estaba frente a nosotros.
Entramos a un campo bastante florido, el sol empezaba a salir, y a calar, se podía sentir la humedad evaporarse del suelo aún empapado de la lluvia de la noche anterior, puede ser peligroso, caminar sin ver tus zapatos cubiertos del pasto, mas en tierra donde la víbora de cascabel tiene su hábitat; al fin llegamos a la orilla del rio, porque nos dimos cuenta que había una desviación mas en el cauce del rio.
Sacando el GPS, pudimos decidir con más seguridad, sobre el rumbo a seguir, lo malo, era que esta vez el agua si nos llego hasta la mitad de las rodillas y el agua un poco más frio de lo normal y seguimos el sendero del ganado, el camino de las vacas, siempre te lleva algún lado.
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Charco Azul |
Algo, cuando caminas hacia un lugar que nunca has recorrido, es que vas pendiente de todo, tus sentidos van alerta, tu adrenalina sube, el dedo en el disparador de la cámara fotográfica está listo, empezamos a ver como a lo lejos el agua principiaba a retenerse y el paisaje aunque fuera un día nublado, tenía su belleza a su modo, es cuando empiezas a trabajar un poco en la búsqueda de esa fotografía, que te llene y cumpla los objetivos deseados.
El final del camino fue una pequeña subida un poco fuera de contexto, después de caminar plano, una subida, ya con la fatiga, el cansancio y el hambre, no es propio para terminar un excelente dia de senderismo por el cause del rio que reposa en la represa de Charco Azul.
Buen Viaje
Simplemente Fotografias